Insomnio.
He vuelto al vicio de los que no duermen. La espera, la búsqueda, la duda... A ver pasar la monótona, la oscura, la fría, la sola... la puta noche; noche donde las sirenas no cantan, aúllan, yendo como las hienas en busca de victimas. Coleccionando colillas en una lata vacía, escupiendo bostezos; coleccionando sueños despierto, bajo los párpados marcados; coleccionando los gemidos eventuales de la vecina que atraviesan los muros; coleccionando los momentos que no tuvimos, junto a la pila de libros (de superación) que también planteó leer. Arropando la melancolía que en noches como esta se me cuelga y me hace suyo.